De la misma manera, un convertidor HDMI a DP permite que un dispositivo con salida HDMI se conecte a una pantalla con entrada Display Port. Este convertidor ajusta los formatos de señal de las dos interfaces de video para hacerlos compatibles. Estos adaptadores son necesarios cuando hay incompatibilidad entre estándares de interfaz, como una laptop con salida HDMI y un monitor con entrada Display Port.